Quantcast
Channel: sacandomelao
Viewing all articles
Browse latest Browse all 11349

La verdadera grandeza no se logra dando órdenes, sino sirviendo

$
0
0
Un oficial estaba dirigiendo las reparaciones de un edificio militar durante la revolución norteamericana. Daba órdenes a gritos a los soldados que tenía bajo su mando, para tratar de lograr que levantaran una pesada viga de madera.

Mientras los soldados luchaban en vano para colocar la viga en su lugar, un hombre que pasaba por allí se detuvo para preguntar al encargado por qué no ayudaba a los otros hombres. Con toda la pompa de un emperador, el soldado a cargo respondió: "Señor, ¡yo soy cabo!".

"¿De veras? - contestó el que pasaba-. No me di cuenta". Después, quitándose el sombrero y haciendo una reverencia, dijo: "Disculpe, cabo". Entonces, el extraño dio unos pasos y se unió a los soldados para ayudarlos a levantar la pesada viga. Cuando terminaron el trabajo, se volvió y le dijo al cabo: "Señor, cuando tenga otro trabajo así y no tenga suficientes hombres, envíe a llamar a su Comandante en Jefe, y yo vendrá a ayudarlo por segunda vez". El cabo quedó estupefacto... ¡la persona que le hablaba era el general Washington!.

Dios mide la grandeza por el servicio. El Señor Jesús dio el ejemplo porque, aunque era Dios y digno de todo honor, "no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos" (Mateo 20:28).

Si queremos ser grandes a los ojos de Dios, debemos servir.

Reflexión: La verdadera grandeza no se logra dando órdenes.
Lectura: Mateo 20:20-28.

"... el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor" Mateo 20:26

www.nuestropandiario.blogspot.com


Viewing all articles
Browse latest Browse all 11349

Trending Articles